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Buenos Aires, Viernes, 22 de Noviembre de 2024 |
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Por Felipe A Fiscina
Para entender la realidad de Argentina se necesitaría un sociólogo, un antropólogo, un historiador y cuando no, un economista. Ante la carencia de ellos a mi alcance, me he propuesto cual “Ingeniero” Blumberg arrogarme esos títulos tan sólo por esta nota.
Ya en la piel de esos cuatro actores fundamentales, noto que este país sigue llevando la pesada carga del falso federalismo de Rosas. Este país fue y será unitario con la ciudad puerto de Buenos Aires como centro indiscutible.
No hay ejemplo más empírico que mis veranos puntanos, cuando en la tele del bar del pueblo anuncian CAOS de tránsito por manifestaciones o interrupción TOTAL de subtes. Se imaginarán ustedes lo que les importa a los oriundos de Cortaderas, allá en los feudos de los Saá, que no anden los subtes o que la Panamericana esté cortada. Ruido de grillos y polvo de calle.
Otro caso es la distribución geográfica que se hace del clima en la Argentina. Ejemplo: Zona Centro 15/20º. Nada más alejado de la realidad. No es el mismo clima en Merlo (San Luis) que en Córdoba capital. Llevándolo a términos más unitarios, es como decir que en la Capital el clima es el mismo que en Azul (Buenos Aires).
Estos ejemplos hablan por sí solos y no hacen más que reafirmar la necesaria puesta en funcionamiento, cuanto antes, de la Ley de Servicios Audiovisuales para terminar con la farsa de las repetidoras.
Las repetidoras no generan trabajo, continúan mostrando la ciudad puerto como el oasis en el desierto. Se necesitan más programas regionales y menos retransmisiones, más fuentes de trabajo y menos sucursales, una Argentina Federal Real y menos Capital Federal.
Así, la gente de San Luis podrá ver el clima detallado de su provincia y las noticias que realmente interesan al pueblo puntano, que no son pocas. |